Con previsión de sol y buen tiempo, nos dirigimos a una de las zonas mas conocidas del país, el Milford Sound. Preferimos no buscar demasiada información del lugar para dejar que nos sorprendiera.
Llegando a Te Anau, aprendimos la segunda lección, sobre conducción en Nueva Zelanda, ya sabíamos que las poblaciones estan muy alejadas entre sí , que conviene llevar el deposito siempre lleno y ser previsor.
Con lo que no contabamos era con que las gasolineras cierran a las 5 de la tarde, increible!!, nos quedamos a 80 km de Te Anau, con el depósito en la reserva de la reserva, obligados a pasar la noche en un pueblo bastantante soso, teniendo un sitio precioso a tiro de piedra.
Pero al final, siempre encuentras solución, después de preguntar a la gente del pueblo por alguna posibilidad de conseguir gasolina, un chico nos pidió que le siguiéramos.
Llegamos a una granja, donde un granjero se a ofreció llenarnos el tanque, ya que el tenía un pequeño depósito. Eso si el hombre vio el negocio y nos quería cobrar la gasolina a precio de oro. Tras unos minutos de regateo, parecía que estabamos en Marrakech, llegamos a un precio razonable, el hacía negocio, y nosotros nos salvábamos de perder un día y que llegase el mal tiempo.
Nos quedaba una hora de luz para llegar a Te Anau, el último pueblo antes de llegar a Milford, para pasar la noche y comprar provisiones para el resto de los días.
Te Anau nos sorprendió ya que esperabamos el tipico destino turístico abarrotado de gente, sin embargo estaba bastante tranquilo y su gran lago lo hace un sitio muy acogedor.
Milforr Sound es un fiordo de unos 15 km con grander montañas de unos 1500 m rodeandolo, se trata de la zona mas humeda del país,por lo que cuadrar un día con buen tiempo, es una lotería.
Queríamos hacer el Milford Track, un Trekking de unos 5 días que termina en el fiordo, pero cuando fuimos al punto de información a reservar las cabañas, nos dijeron que se encontraba cerrado por las nevadas de los últimos dias, había peligro de desprendimiento.
Nos ofrecieron la opción de hacer solamente la parte final pasando una noche en la última cabaña y regresando por el mismo camino, parecía buena idea. El pero que necesitabamos por lo menos ser cuatro para reservar, asi que despues de esperar media hora a alguien que quisiera acompañarnos, decidimos abortar misión y subir con la furgo y hacer algun trekking por la zona.
Veríamos el fiordo desde el barco, que tampoco esta mal.
De camino, la Milford Highway, 120 km para llegar que ya eran en sí una maravilla recorrerlos.
Eso sí,a los pocos kilómetros de llegar cuando parece que la carretera termina y te vas a estrellar contra una pared de roca, te metes en el tunel mas tenebroso del mundo.
Entra un vehículo a duras penas y parece que esté sin terminar, son solo 1,2 km pero la completa oscuridad y su tamaño hacen que no te encuentres muy cómodo dentro.
Nos sorprendió que a pesar de estar en primavera la zona estaba bastante tranquila, y en nuestro barco apenas éramos 15 personas.
Fue impresionante navegar por el mar rodeado de moles gigantes de piedra, todo lleno de cataratas, uno de esos lugares que te deja sin palabras.
Solamente te dabas cuenta del tamaño real de las montañas, cuando veías el barco, que era grande, totalmente insignificante.
Fue una maravilla quedarse hasta la puesta de sol , cuando todo el mundo se había ido, ayuda mucho que la gente suele cenar sobre las 6 de la tarde, así que las puestas de sol aunque parezca mentira eran muy tranquilas, en contraste con el movimiento que suele haber al mediodía, cuando llegan los autocares cargados de turistas, que viajan desde Te Anau.
Cuando regresamos al parking la furgo nos dio el tercer aviso, no arrancaba, no hacía ni el amago, menos mal que conocimos a unos catalanes en el barco que nos dieron un empujón… y solucionado
pero la Happy camper nos estaba mosqueando y los 450.000 Km que tenía parecía que se estaban haciendo notar.
Pasamos un par de días haciendo trekking por la zona, donde nos sorprendió no encontrar a nadie en 20 Km.
Aqui los caminos estan perfentamente marcados y cuidados, pero eso sí todo muy bien integrado en el paisaje.
Hasta nos encontramos unos baños publicos en lo alto de una montaña en un sitio inaccesible, supongo que llevarían la cabina en Helicoptero. Una pasada!
La zona da para mucho y te podrías quedar 15 días haciendo cosas diferentes , pero continuamos en estado de hiperactividad, y el buen tiempo continua!
Hola Nenes!
BIen, bien, no? Preciosos sitios, más desde cerca de la calle autonomía en Bilbao.
Keeeeee…, ke disfrutéis mucho, es la primera vez ke consigo entrar a esto, no sabía nada de vosotros, ´también mke voy poco por torre.
Lo dicho, disfrutad mucho, y ya sabes, si se jode el blog o la cámara, acuérdate de mí y sonríe, jejejejejejee
(y se agradece desde aquí)
Ah, por cierto, sabes algo de las bicis nuestras: Fabio tampoco sabía nada y ya pasó un rato
Abrazo grande, hasta pronto
Keko
Cabrón, me acaba de picar el mosco del viaje, todo por mirar este blog
jauajuajua!!!!
Sigan infectándonos
por favor, donde tengo que reservar para ir a hacer la travesía?
Nosotros lo hicimos allí mismo, sobre la marcha.